A pesar de un rendimiento global constante o creciente, la ingeniería mecánica moderna e innovadora se caracteriza por unas dimensiones exteriores cada vez menores. Esta evolución también se observa en el campo de la tecnología de accionamiento. Los elementos de conexión necesarios desempeñan aquí un papel importante.



Aquí es donde el acoplamiento de fuelle metálico KPS demuestra de lo que es capaz. Además de las conocidas ventajas de un acoplamiento de fuelle (compensación de la desalineación del eje, bajo momento de inercia, alta rigidez a la torsión, absolutamente libre de holguras, libre de mantenimiento, diseño totalmente metálico insensible a la temperatura), también entra en juego la longitud total muy corta del cubo del cono de expansión para una instalación integrada. El cono de expansión se conecta de forma segura con un orificio axial adecuadamente dimensionado del eje.



Al utilizar un cubo de cono de expansión por un lado y un cubo de apriete radial por el otro, se mantiene una conexión rotacionalmente simétrica y bloqueada por fricción y se garantiza una manipulación fácil de montar. Sin embargo, la longitud de montaje dentro del sistema global se reduce considerablemente. Esto hace que sea ideal para aplicaciones con distancias entre ejes pequeñas y condiciones de instalación ajustadas.



Gracias a su alta rigidez a la torsión y a sus bajos momentos de inercia, el acoplamiento de fuelle metálico es ideal para accionamientos altamente dinámicos.



En general, este acoplamiento es adecuado como elemento de conexión para sistemas de accionamiento complejos, para el montaje de cajas de engranajes, la conexión de codificadores, así como para accionamientos de husillos y ejes.