En los laboratorios de ciencias de la vida, donde la precisión y la pureza no son negociables, la demanda de soluciones respetuosas con el medio ambiente es ahora mayor que nunca. Los laboratorios se enfrentan al impacto medioambiental de sus actividades y son conscientes de que la creciente demanda de consumibles de plástico no es respetuosa con los recursos. Por lo tanto, para ser más sostenibles, los futuros consumibles de laboratorio fabricados con materiales plásticos deben poder fabricarse a partir de materias primas renovables o recicladas.

El compromiso de Eppendorf con la sostenibilidad es evidente en muchas áreas, incluida la transición de los consumibles de laboratorio a materias primas de base biológica, a partir de 2022. Al mismo tiempo, los materiales reciclados también muestran un gran potencial para aquellas partes de un producto que no entran en contacto directo con la muestra. Los materiales reciclados, también conocidos como reciclados, se conocen generalmente como plásticos reutilizados de PE (polietileno), PP (polipropileno) o PET (tereftalato de polietileno), que han sido desechados al menos una vez por hogares o empresas y que se utilizan para la fabricación de nuevos productos.

"El "Post Consumer Recyclate (PCR)" utilizado para las gradillas desechables para puntas de pipeta es de origen industrial, obtenido exclusivamente a partir de materiales sobrantes que surgen durante el proceso de fabricación de lentes de contacto", afirma Brigitte Klose, Directora Global de Marketing de Consumibles de Eppendorf SE."Este tipo de recogida de polipropileno de origen único procedente de la fabricación de productos médicos garantiza que el reciclado conservará la pureza y la integridad que son una condición del proceso de fabricación de los consumibles de laboratorio. Solicitamos a nuestros proveedores documentación relativa a la trazabilidad del reciclado, así como la conformidad de todos los procesos con la norma EN 15343:2007."


Desde finales de mayo de este año, Eppendorf ha iniciado la transición a reciclados de aquellos envases que contienen consumibles. Inicialmente, esta transición se refiere a las gradillas para puntas de pipeta de un solo uso que se suelen utilizar en laboratorios que realizan trabajos estériles. Estas gradillas de un solo uso son indispensables para la utilización de las puntas de pipeta. Las gradillas proporcionan estabilidad y protección a las puntas de pipeta, hasta la última punta. Al igual que las puntas de pipeta, estas gradillas de un solo uso deben ser de la misma pureza y esterilidad, y hasta ahora se habían fabricado con polipropileno de base fósil altamente puro. "Esta transición al reciclado conservará este recurso limitado de combustibles fósiles, y Eppendorf conseguirá un ahorro de más de 166 toneladas de CO2 al año", afirma Klose.

Este cambio en el polipropileno utilizado para la fabricación de las gradillas no influirá ni en la pureza, ni en la esterilidad, ni en la estabilidad de las puntas de pipeta epT.I.P.S.® en gradillas de un solo uso. Nuestros clientes pueden cambiar fácilmente, sin sufrir ninguna pérdida de calidad. Esto se verifica además mediante certificados de calidad específicos para cada lote.