El 14 de junio de 2022, Johann Sailer puso la primera piedra del nuevo edificio administrativo. El 18 de abril de 2023 -apenas 10 meses después- se celebró la ceremonia de coronación.

En una ceremonia festiva se izó la corona de remate sobre el futuro edificio administrativo de GEDA.
Johann Sailer abrió el acto visiblemente emocionado con unas palabras, que también hicieron sonreír de vez en cuando a los invitados. "Se ha dado el importante paso hacia el futuro y estoy deseando dirigir la compañía hacia la próxima generación de la mejor manera posible". Dio las gracias explícitamente a la administración del distrito, al municipio y al consejo local por la gran cooperación y el constante "oído abierto". También agradeció su trabajo a la arquitecta Bettina Kandler. Los artesanos seguirán ocupados durante un buen año haciendo realidad el diseño de la arquitecta de Donauwörth.

Lo más destacado del acto: el discurso de despedida
El tradicional discurso de despedida corrió a cargo del ingeniero de estructuras Michael Bürle. Tradicionalmente, se bebe vino y se tira la copa al suelo, ya que se sabe que los cristales rotos traen buena suerte. A continuación, los invitados de honor, Stefan Rößle (administrador del distrito de Donau-Ries) y Martin Paninka (alcalde de Asbach-Bäumenheim), pronunciaron un breve pero acertado discurso.
Esfuerzo final Una vez terminada la excavación del sótano, a pesar del elevado nivel de las aguas subterráneas en Asbach-Bäumenheim, el concepto se hizo más claro cada día a medida que avanzaba la construcción.

Será un edificio en forma de cruz para garantizar que pueda verse desde todos los lados. De este modo, todas las salas recibirán luz natural desde todos los lados, lo que creará un ambiente de trabajo óptimo. El diferente número de plantas confiere al edificio un aspecto dinámico y la fachada predominantemente acristalada encierra los 6.000 metros cuadrados de oficinas. En el centro del edificio habrá -como no podía ser de otra manera para un fabricante de ascensores industriales y para la construcción- un ascensor original de GEDA.

Otro punto destacado será el restaurante público, que se aleja deliberadamente de una cantina "clásica". Aquí se servirán platos regionales y de alta calidad, de los que no sólo se beneficiarán los empleados de GEDA. Alrededor de 220 empleados encontrarán espacio en el nuevo edificio, y los futuros modelos de lugar de trabajo podrán aplicarse con flexibilidad. En el cambiante mundo laboral actual, esto es indispensable. El edificio administrativo será pionero en la región en todos los aspectos.
El nuevo edificio recibirá el premio DGNB en su categoría de oro, que se concede a construcciones especialmente sostenibles. Esto se mide, entre otras cosas, en función del ciclo de vida. Además, la calefacción y la refrigeración correrán a cargo de una bomba de calor y ya está en funcionamiento un sistema fotovoltaico instalado en los tejados de los pabellones existentes para generar electricidad. Un sistema de ventilación muy moderno garantiza un clima interior óptimo durante la jornada laboral.
El alcalde Martin Paninka está muy contento por la empresa y orgulloso de este impresionante proyecto. Otro de los invitados de honor, el administrador del distrito Stefan Rößle, felicitó a la empresa y le dio las gracias por esta gran inversión en Asbach-Bäumenheim: "Hoy en día no es normal que las empresas sigan invirtiendo en Alemania, a pesar del aumento de los costes energéticos y salariales. Para una empresa como GEDA, con sucursales en todo el mundo, sería fácil invertir en otro país".
En resumen, probablemente pueda decirse que para GEDA era exactamente el paso correcto construir ahora este edificio. Es positivo que los habitantes de Asbach-Bäumenheim y toda la plantilla estén detrás del proyecto. La empresa está óptimamente posicionada para el futuro
y se nota cuánto "corazón y alma" hay detrás