El temblor se define como un movimiento rítmico e involuntario de una parte del cuerpo. Aunque todo el mundo tiembla de vez en cuando, por ejemplo cuando está nervioso, este ligero temblor no interfiere en las actividades cotidianas. Sin embargo, otras patologías conducen a un temblor incapacitante. Por ejemplo, el temblor esencial es el trastorno neurológico del movimiento más común y afecta a más del 5,8% de la población mayor de 65 años en todo el mundo. Se calcula que más de 10 millones de personas en el mundo padecen la enfermedad de Parkinson. Ambos trastornos pueden causar grandes dificultades para realizar actividades de la vida diaria, como comer y beber. Aunque el temblor puede tratarse a veces con farmacoterapia o cirugía, estos tratamientos tienen inconvenientes. La medicación produce una reducción limitada del temblor en aproximadamente la mitad de la población con temblores. La cirugía puede ser un procedimiento peligroso para determinadas personas, y también es probable que la eficacia de dicho tratamiento disminuya con los años. En este contexto, los tratamientos que abordan eficazmente el temblor modificando la biomecánica de las extremidades pueden ser una solución alternativa viable. Este es el enfoque que persigue STIL con la nueva órtesis para la estabilización del temblor.

Un destello de inspiración
A IJsbrand de Lange, director general y fundador de STIL, se le ocurrió por primera vez la idea de una ayuda biomecánica en 2014 cuando vio un vídeo promocional de la Fundación Michael J. Fox sobre personas con la enfermedad de Parkinson. Él narra: "Estos temblores son movimientos involuntarios en los brazos que se producen cuando los músculos se contraen y se liberan repetidamente. Aunque el temblor es el síntoma de un trastorno neurológico, básicamente también consideraba que el temblor de manos era un defecto mecánico, sobre todo porque entonces era licenciado en ingeniería mecánica y veía el problema desde una perspectiva técnica. Si una máquina vibra involuntariamente, se pueden aplicar técnicas de amortiguación activa o pasiva y resolver los problemas. Por qué no iba a funcionar para una persona, pensé. La idea se me quedó en la cabeza, y mientras realizaba unas prácticas en la Red de Aprendizaje Biónico de Festo en Alemania, tuve una idea que quería trabajar para mi proyecto final", así que construyó un dispositivo experimental de prueba que podía replicar y suprimir las vibraciones para su tesis de máster en la Universidad Tecnológica de Delft. Aunque este dispositivo estaba todavía en sus inicios, demostró que las fuerzas mecánicas podían utilizarse eficazmente para suprimir los temblores.

Primero premios y subvenciones, luego un callejón sin salida
Sobre esta base se fundó STIL en 2017. Tras años de investigación, el equipo trabajó con pacientes y médicos para desarrollar una solución vestible que suprime los temblores, la órtesis STIL. Este dispositivo médico redirige las fuerzas biomecánicas de la mano a la parte superior del brazo mediante una estructura cinemática con múltiples articulaciones artificiales. En primer lugar, este diseño patentado permite una total libertad de movimiento del brazo. Además, en cada una de las articulaciones se integran amortiguadores especiales para contrarrestar el movimiento oscilatorio de alta frecuencia del temblor, pero permitir los movimientos previstos. Esta combinación hace que la órtesis STIL sea única en el mundo y permite a los pacientes con temblores volver a comer y beber de forma independiente. STIL no tardó en encontrar socios en los Países Bajos, como EIT Health, Rabobank, el hospital Reiner de Graaf e incluso la Fundación Holandesa del Cerebro, para apoyar la puesta en marcha. Esto condujo al desarrollo de varias generaciones de ortesis antitremorales en el aspecto técnico, que atrajeron la atención en los círculos profesionales, ganaron premios y también colaboraciones a nivel internacional, como un proyecto Eurostars junto con el Instituto Fraunhofer de Ingeniería Biomédica. Al mismo tiempo, entre bastidores, IJsbrand de Lange, Nicola Pambakian, Director de Tecnología de STIL, y su equipo mejoraron continuamente el diseño de su invento y desarrollaron sus propios componentes, en parte utilizando el CAD y las impresoras 3D, en parte mediante el abastecimiento de elementos de máquinas estándar disponibles. Este último fue el caso de la identificación del componente adecuado para integrar en la órtesis para ayudar a amortiguar y controlar los movimientos de la mano y la muñeca. En un principio, STIL intentó utilizar frenos de rotación disponibles en el mercado, pero rápidamente se dio cuenta de que estos componentes no eran adecuados para su caso de uso. Cuando Nicola Pambakian y el equipo de ingenieros necesitaron el apoyo de su proveedor para una solución de amortiguación personalizada, se encontraron con un callejón sin salida. Buscar en Internet fabricantes de amortiguadores alternativos fue la parte fácil. Sin embargo, encontrar un socio proveedor dispuesto a hacer un esfuerzo adicional con STIL es otra historia.

Pensar globalmente y actuar localmente
Durante su investigación en línea, STIL identificó a ACE Stoßdämpfer GmbH como un posible candidato a la cooperación. La empresa, con sede en Langenfeld (Alemania), forma parte de Stabilus, uno de los principales proveedores de soluciones de control de movimiento, y ofrece ingeniería personalizada, además de una amplia gama de productos estándar para amortiguar y controlar los choques y las vibraciones. Otro punto a favor es que ACE coopera muy estrechamente con los clientes y las partes interesadas a través de una amplia red de ingenieros de ventas propios y socios de ventas externos en toda Europa. Por ejemplo, Han Titulaer y Ralf Küppers llevan más de una década trabajando con éxito con clientes y distribuidores como expertos en ACE en los países del Benelux. STIL se sintió rápidamente atraído por el estilo de trabajo de ACE de pensar globalmente y actuar localmente, ya que Han Titulaer se convirtió en un primer punto de contacto cada vez más importante a nivel local para el asesoramiento profesional y las muestras de productos. Como ACE está familiarizada con el control de las vibraciones mecánicas y con las aplicaciones de la tecnología médica, la empresa pudo aportar directamente conocimientos específicos para el caso de uso de la órtesis STIL. Así, se pudieron encontrar diferentes tipos de frenos de rotación en la cartera, que ofrecieron resultados prometedores en la prueba con pacientes, un gran comienzo para una asociación a largo plazo. "Cuando vimos los requisitos de STIL en cuanto a las propiedades de amortiguación, el dimensionamiento, pero también la durabilidad, todavía no había soluciones de amortiguación adecuadas en el mercado", explica Han Titulaer, "y se hizo aún más difícil si se tiene en cuenta que están integradas en un dispositivo que los pacientes llevan todos los días"."En resumen, STIL tenía claramente en mente las necesidades del paciente y el rendimiento adecuado de los cojines, pero no los recursos para crear el producto físico de ajuste óptimo. Por ello, los ingenieros de STIL preguntaron a Han Titulaer y al creciente equipo de proyectos de ACE, dirigido por el Dr. Peter Kremer, director general, y Heiner Tapken, director de producto, si sería posible trabajar juntos para desarrollar un nuevo y revolucionario amortiguador para su producto médico. ACE aceptó el reto.

Ir más allá
La amplia gama de soluciones de amortiguación de vibraciones y control de velocidad en la selección de ACE y la voluntad de la empresa de desarrollar productos personalizados junto con sus socios demostraron ser una combinación ganadora. La cooperación comenzó con la definición de los requisitos técnicos y del usuario, como el comportamiento de frecuencia deseado y las fuerzas de carga axial. Además, no se permite el retroceso para esta aplicación en particular. De lo contrario, el movimiento de temblor no sería absorbido adecuadamente por el amortiguador y se perdería en el juego. Esta característica casi nunca se consigue con los componentes disponibles en el mercado. Y por último, pero no por ello menos importante, el producto debe tener una vida útil significativamente más larga que un freno de rotación convencional.

Después de que el equipo de consultores y los ingenieros de ACE estuvieran a la altura del reto y desarrollaran los nuevos frenos de rotación, ACE llevó a cabo primero las revisiones técnicas antes de que se pudiera llevar a cabo la validación de STIL con pacientes. En total, se desarrollaron tres generaciones de frenos de rotación durante la colaboración iterativa hasta que el equipo alcanzó la solución ideal. A continuación, STIL dio el visto bueno a un importante contrato para utilizar la serie especial de frenos de rotación en el primer ensayo clínico, que se espera que esté terminado a finales de 2022. Si estos resultados también son positivos, la empresa podrá obtener el marcado CE de su exclusivo dispositivo médico. Este logro no habría sido posible sin el apoyo y la perseverancia de ACE.

"Ha sido muy emocionante para ACE formar parte de este fantástico proyecto. El joven equipo de IJsbrand y Nicola ha desarrollado un producto muy innovador que ayudará a muchas personas en su vida cotidiana. Estamos muy contentos y orgullosos de haber podido proporcionar a STIL la solución de amortiguación que buscaban y deseamos a la empresa mucho éxito en todo el mundo", dijeron el Dr. Peter Kremer y Heiner Tapken. Un feliz IJsbrand de Lange recuerda la colaboración y comenta: "A lo largo de los años hemos trabajado con muchos socios, pero ninguno ha mostrado el compromiso que ACE ha invertido en nuestra asociación. Quedé, y sigo estando, muy impresionado por la flexibilidad, la calidad del servicio y los excelentes productos que ofrece ACE".

STIL está a punto de lanzar la órtesis Anti-Tremor en el mercado sanitario holandés. La empresa también unirá fuerzas con Stabilus, la empresa matriz de ACE, para mostrar esta solución de tecnología médica en un escenario más amplio por primera vez en Medica 2022 del 14 al 17 de noviembre en el pabellón 14, stand D68. La introducción de la órtesis en otros países europeos está prevista para 2024, con Alemania como mercado piloto.